Y el gran día para María & Javier llega, es su boda en Zaragoza con grandes nubarrones entrando amenazantes cubriéndolo todo, así hay muchas probabilidades de tormenta en el horizonte.
De esta manera María & Javier, nuestra joven pareja, inician los preparativos para uno de los momentos más bonitos de una pareja… Su boda.
Y los nervios están a flor de piel, sin duda alguna con el pasar de los minutos y las horas van aumentando a niveles insospechados.
Javier y sus padres, después de asistir a la peluquería, siguiendo con el tiempo establecido para vestirse, echan la vista en el tiempo.
Hay tantas anécdotas y recordando a los seres queridos ausentes, así los nervios comienzan a apremiar pues hay que ponerse guapos para este momento.
Por otro lado tenemos a María en su casa con muchos nervios si muchos nervios, pensando y mirando en la gran tromba de agua que cae sobre la ciudad.
De esta manera y con muchísimos nervios nuestra bella novia comienza a vestirse con la ayuda de su hermana y su madre.
Es simplemente hermoso ver y captar momentos únicos en la vida de una novia y su familia.
Es la hora de salir hacia la iglesia, localizada en la Parroquia de Santa María de Montecanal en Zaragoza.
A pesar de la tormenta hacen su salida Javier y sus padres. En este momento es como si el cielo fuese a caerse sobre Zaragoza.
A partir de este momento, tenemos que esperar a la radiante novia y su comitiva, mirando el reloj o preguntando a los amigos la hora.
Y la espera continúa, los nervios en la iglesia están a punto de saltar por los aires. El sacerdote también preguntado donde está la novia.
De esta manera nuestra linda novia está a punto de llegar por lo que todos los asistentes deben ingresar en el templo para esperar.
Esta es una boda en Zaragoza en una tarde de tormenta de mayo.
No hay palabras para describir todo lo ocurrido, a continuación en esta tarde donde parece el cielo va a derramar toda el agua sobre nosotros.
Pero lo más importante para nosotros como fotógrafos de bodas fue captar rostros llenos de alegría, lágrimas, el regocijo de padres e invitados.
Sin duda alguna estos son los momentos que se guardan para siempre en nuestra retina. Ahora sí el amor se respira, podemos decir que vuela libre de la tensión de minutos anteriores.
Y nuestras fotografías cuentan todo lo ocurrido ese sábado de tormenta en el hotel Hiberus de Zaragoza.
Así transcurre uno de los momentos más hermosos y emotivos en la vida de María & Javier.
Finalmente pareja no queda más que desearles toda la dicha y felicidad de mundo, porque os lo merecéis.
Si tienes una duda puedes rellenar nuestro formulario AQUÍ o tal vez mediante nuestras redes sociales. Para nosotros siempre será un gusto poder responder todo lo que tengas en mente.
